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Bowcliffe Hall

En el célebre Bowcliffe Hall ya no se lustran los vasos a mano

Bowcliffe Hall fuera

«Los lavavajillas y lavavasos de MEIKO son mucho mejores que el resto de equipos que conozco», comenta Topham.

El Bowcliffe Hall tiene una dilatada historia. Situado a las afueras de Wetherby, este célebre edificio protegido de Grado II, destinado a albergar conferencias, bodas y eventos, cuenta entre sus antiguos propietarios con el pionero del mundo de la aviación, Robert Blackburn.
Este ingeniero construyó su primera aeronave en 1909, justo seis años después de que los hermanos Wright realizaran su primer vuelo.
Casi un siglo después, el Bowcliffe Hall ha inaugurado su salón de actos Blackburn, construido con la misma forma que una de las alas de aquella primera aeronave.

La idea de crear un espacio para eventos diseñado en forma de ala de biplano gigante y escondido en medio del bosque fue del emprendedor, Jonathan Turner. El establecimiento se encuentra repleto de muebles de inspiración aeronáutica, incluyendo una tabla hecha a partir de un ala de aluminio moderna y un bar fabricado con la cubierta de un motor. Su visión era rendir tributo al legado del Bowcliffe, que es al mismo tiempo la sede central de su empresa, The Bayford Group, centrada en las empresas energéticas, las tarjetas para combustible, las inversiones y el desarrollo inmobiliario, la prevención de la contaminación y el comercio electrónico.

John Topham, que fue nombrado cocinero del año (Pub Chef of the Year) en Reino Unido, se encarga del catering, tanto en los eventos como en el restaurante que dirige para sus inquilinos.

En el Bowcliffe se utilizan dos lavavasos bajo encimera FV40.2G-GiO y un lavavajillas de capota DV 80.2 GiO suministrados e instalados a través de Port Catering, uno de los distribuidores oficiales de MEIKO en Blackpool.

 

Topham comenta que eligió a MEIKO «después de una exhaustiva búsqueda». La conclusión fue que, sin duda, MEIKO hacía las cosas mejor.

«Quería estar convencido especialmente de que no íbamos a malgastar el tiempo dando lustre a la cristalería Riedel y a la porcelana china», explica.
«Realicé una comparativa entre diversos productos de varios fabricantes y me puse en contacto con compañeros del ramo. Descubrí que los mejores establecimientos contaban con equipos MEIKO y que solo recibían buenas críticas».

«El servicio y la atención recibida también han sido de primera clase. Hubo un momento en el que, por ejemplo, nos quedamos sin cestas de lavado porque las perdimos al realizar la reforma, así que me puse en contacto con el jefe de ventas local de MEIKO, Lee Hackett, para explicarle nuestro problema, y al día siguiente se presentó con un juego nuevo para nosotros. Para mí, esto es muestra de un extraordinario servicio al cliente».

Topham también es propietario de un establecimiento del siglo XVIII reconvertido ahora en un restaurante de cinco estrellas con coctelería llamado The General Tarleton Inn, cerca de Ferrensby. Allí también emplean un lavavajillas de capota DV 80.2 G-GiO con sistema de ósmosis inversa integrado, completado esta vez con la garantía «No-Bills» de tres años de MEIKO.

«Los lavavajillas y lavavasos de MEIKO son mucho mejores que el resto de equipos que conozco. Conseguí incrementar las exigencias de lavado en el Bowcliffe para incluir equipos de MEIKO, pero el presupuesto no alcanzaba para añadir el paquete de tres años 'No-Bills'», comenta Topham. «Lo que estaba claro es que en mi propio pub no podía faltar. Podemos llegar a servir 1500 comidas a la semana, así que solemos estar bastante ocupados; por eso quería el mejor equipo posible».